Lucas no podía creer que había llegado al límite de sus
celos y casi había perdido a su “bruja” otra vez, pero menos mal que ambos habían
terminado la discusión de la mejor manera con sexo de reconciliación sabía muy
bien que si metía las patas ahora la perdería para siempre ya que sabía que el
maravilloso jefe que tenía estaba esperando su error para lanzarse sobre ella
otra vez y eso era algo que ni en sus sueños dejaría que pasara.
-Cariño.-grito Amaranta desde la
puerta.- ¿Dónde estás?
-En el baño.-grito Lucas-.
-Permiso ¿puedo ocupar tu ducha?
-Claro, pero ¿porque volviste?.
-Uuff déjame ducharme y te cuento
todo bueno.-dijo mientras le daba un beso en los labios-.
-Bueno yo iré a preparar el
desayuno mientras te duchas.
-Bueno mi bruto.
Lucas preparo un desayuno para recuperar las fuerzas pérdidas
durante la noche su bruja era una pequeña gata en celo en la cama y eso no podía
tenerlo más encantado nunca pensó que llegaría el día en el cual encontraría una
mujer que lo aceptara tal cual era, tal vez su destino era la mujer que estaba
en su ducha desnuda con el agua corriendo por su cuerpo por esos pechos y sus
pezones….y deja de pensar en eso campeón que hoy no llegamos a tiempo a
trabajar.
-Ya estoy lista.-dijo mientras lo
abrazaba por la espalda, le encantaba sentir sus pechos presionándolo, era una
exquisita tortura.
-Me encanta cuando haces eso.
-¿Qué cosa?.
-Oh lo sabes muy bien.-dijo
mientras la sentaba en el mostrador de la cocina para poder mirarla a los ojos
y devorarle la boca-.
-Frotar mis pechos en esa
musculosa espalda que tienes, ¿es eso?
-Si sabes muy bien el efecto que
tiene eso en mi pero creo que te gusta torturarme.
-Pues claro, pero también para complacerte,
porque me encanta que me des placer con tu enorme herramienta que tienes pero a
mí me encanta darte placer.
-Me das tanto placar que pensé que
nunca llegaría a sentir algo así.
-Eso me encanta, pero ahora me
apetece otro tipo de alimento, muero de hambre.
-Claro siéntate mientras te
sirvo.
Cuando ya estaban sentados y comiendo el desayuno que había preparado
Lucas el recordó que ella aún tenía que decirle porque había vuelto a su dpto. Esperaba
que Amaia no la haya atacado de alguna manera o haya visto algo que no le
gusto.
-Bueno, ¿ahora me vas a decir por
qué volviste?
-Mmmm bueno es que cuando entre a
mi dpto. Estaba todo muy tranquilo y pensé que Amia a lo mejor no había vuelto
o que estaba durmiendo, yo le había asignado una pieza de invitados que tenía
libre pero cuando entro a mi habitación la encuentro ahí pero no sola.
-¿Qué?, me vas a decir que esa
mujer metió a alguien a tú casa sin tú consentimiento.
-Pero es que ese alguien no es
cualquiera.
-¿Qué quieres decir?.-dijo un
poco confundido solo esperaba que no fuera el hermano de Amaranta ya que se veía
que esa mujer hace mucho había dejado de ser virgen-. Habla
-Ese hombre….. ese hombre era mi
jefe.-dijo en un susurro ya que aun guardaba esa imagen de Amaia montada encima
de su jefe.-
-¿Qué tú jefe Nicolás?.
-Sí y créeme que nunca en mi vida
voy a poder olvidar de la imagen de ella montada sobre él.
-Uff que manera de empezar tú día
mi pequeña, pero ya sabemos que ambos encontraron la horma de su zapato.-dijo
con un deje de ironía ya que ahora sabía que nadie los separaría definitivamente
había sido su mejor mañana.-
Aunque no supiera que “esos” estaban tramando un plan que podría
destruir toda su felicidad….
tan cortito? quiero mas un beso y espero ese par de alimañas no consigan lo que quieren
ResponderEliminarjajaja cortito pero intenso :D
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